domingo, 12 de octubre de 2008

Amar y no ser amado

A un Ángel le pregunté,

¿Cuál es el peor castigo?

Y el Ángel me respondió;

Que entregues tu corazón,

Y las puertas estén cerradas.

Que entregues tu alma,

Y no haya brillo en sus ojos.

Que entregues tus besos,

Y roces unos labios fríos.

Que entregues tus manos,

Y te encuentres siempre caída.

Que entregues tu sonrisa,

Y no te reflejes en su rostro.

Que entregues tus caricias,

Y no recibas un cálido abrazo.

Que entregues tu llanto,

Y no tengas consuelo.

Que entregues tus sueños,

Y no exista futuro.

Que entregues tus palabras,

Y obtengas un vacío.

Que entregues tu integridad,

Y ganes debilidad.

Que entregues tu espalda,

Y cargues con tu lamento.

Que entregues tu oído,

Y no existan palabras.

Que entregues tu olfato,

Y no haya fragancia.

Que entregues tu cuerpo,

Y no haya valor.

Que entregues tus pies,

Y camines un desierto de agonía.

¡Tú me preguntas!

¿Cuál es el peor castigo?

Y yo te respondo;

Amar... y no ser amado.

1 comentario:

Geraldine, dijo...

hola, te cuento que llegue por primera vez a tu blog y me ha gustado mucho, yo recién comienzo con el mío, espero que pases a visitarme, me gustaría que intercambiásemos links, muchos éxitos...gery desde buenos aires
www.suerteperdida.blogspot.com

Lo que uno puede hacer por amor